Mucho se debatió acerca de la posibilidad de que la mujer acceda al sacerdocio. Sin más, y a riesgo de que nos tilden de cerdos machistas (con justa razón) aquí va el listado de motivos por las que
NonSancto se opone:
Tardarían horas en revestirse para la misa: si bien el vestuario ya está estipulado y no lo puden variar demasiado; encontrarían la forma de demorarse buscando el mejor accesorio que combine con la estola o el pequeño detalle que haga resaltar lo fantástico que quedó el bordado de la casulla.
Los secretos de confesión: ¿hace falta hacer algún comentario?
Homilías largas y sin mucho sentido pastoral: sin importar el Evangelio del día, la homilía se centrará en lo que le pasó a la protagonista de la novela en la última semana y serían del estilo
"Lo que la liturgia nos dice este domingo es como lo que le pasó a la hermanastra pobre de la novela que se besó con su medio hermano que en realidad no lo es porque fue adoptado y nadie lo sabe..."Se mudarían de pieza en el seminario: cuando la vida del seminario se torne monótona, intercambiarían piezas entre las seminaristas para animar (?) un poco la cosa... (sabemos que esto sólo lo entenderán un grupo muy limitado de personas -que tal vez ni lean este blog- pero no pudimos resistir la tentación de incluirlo)
Usarían el santo óleo como perfume: así, en el Sacramento de la Unción, después de ungir al enfermo, volvería a mojar los dedos en el óleo para ponerse una gotita del perfume detrás de cada oreja, de pura coqueta, ¿vio?
Las flores del altar: en vez de dejarlas ahí para simbolizar la alegría de la fiesta, se las llevarían ellas para salir con el ramo en mano saludando cual reina de concurso de belleza.
Decoración de la Iglesia: Cada dos por tres habría que cambiar los muebles de lugar, pintar, empapelar, alfombrar o lo que fuera... siempre inspirados por las últimas tendencias que salgan en Utilísima.
Conmemoracion de Santos: Todos los meses festejaríamos la fiesta de San Andrés, el apóstol que viene una vez al mes...
Misas concelebradas: Sería un caos... ¿Se imaginan un grupo de mujeres compartiendo "escenario" sin que ninguna deba destacarse por sobre la otra? ¿Y el tema de la ropa? La de inventos raros que harían para no estar todas iguales y ser la más "fashion" de todas... Eso sí, se abriría un nuevo mercado para los diseñadores de estolas...
Las canciones de misa: los cancioneros se llenarían de cantos de Arjona, Chayanne y Luis Miguel... por nombrar sólo algunos.